Luis Mariano Ruiz Aguirre
Artista creativo
Soy Luis Mariano Ruiz Aguirre, profesor titular del departamento de Métodos Cuantitativos de la Universidad del País Vasco (UPV-EHU). Desde 1991 imparto clases de Matemáticas en la Facultad de Económicas de la UPV-EHU en Bilbao. He publicado varios trabajos de investigación sobre economía matemática en revistas internacionales de reconocido prestigio.
Hace unos veinte años, después de una pérdida muy dolorosa, atravesé una profunda crisis que me llevó a cuestionármelo todo. Inicié entonces una fase de crecimiento personal, de búsqueda de la paz interior, del equilibrio, de intentar comprender el sentido de la vida. Al principio leí muchos libros de autoayuda. Después participé en todo tipo de talleres, y más adelante procuré poner toda mi atención en aprender de la mejor escuela posible, la escuela de la vida.
En algún momento de ese proceso mi creatividad se despertó. Y me entraron ganas de hacer cosas nuevas. Primero empecé escribiendo cuentos infantiles. Cuentos con la intención de sembrar en los niños semillas de solidaridad, de compañerismo, de ternura, de paz, y del coraje necesario para afrontar los grandes cambios que nos esperan. Cuentos para intentar también despertar la conciencia de los padres.
Después de comprobar, con mucha frustración, que por ese camino no se acababa de abrir ninguna puerta, empecé más en serio con la pintura. En realidad el arte siempre había estado ahí. Mi padre pintaba y de pequeño intentó enseñarme a mí también. Me llevaba al museo, a ver exposiciones… A él le hacía mucha ilusión que alguno de sus hijos siguiera sus pasos. Sin embargo, en aquellos tiempos, yo no le hice mucho caso. Y no fue hasta pasados unos años de su muerte cuando decidí apuntarme a una academia de pintura, la academia Arthenea, donde todavía hoy sigo aprendiendo con mi profesora Esther Lobo.
Mejorar la técnica me costó más de lo que hubiera deseado. Pero pronto me aburrí de copiar, y en seguida, quizás sin estar suficientemente preparado, empecé a pintar mis propios cuadros, a plasmar mis ideas en el lienzo. Y eso me gustó mucho, dar rienda suelta a mi imaginación, trabajar mi creatividad, reflejar en mis obras las cosas he ido entendiendo sobre la vida, lo que más me preocupa, lo que me emociona, lo que me llama la atención, o simplemente aquello en lo que encuentro belleza.
Mi estilo es difícil de definir. Surrealista, dice algún entendido. Simbólico dicen otros… No lo sé. supongo que lo mejor es ver los cuadros y que cada cual se haga su propia opinión.
Lo cierto es que la mayoría de mis obras son bastante diferentes entre sí. Y de hecho voy a procurar que así siga siendo. Ese es mi sello personal, mi firma, mi declaración de intenciones. Ser original y repetirme lo menos posible. Y espero que esto me ayude a su vez a diferenciarme de los demás.
En esa búsqueda de hacer cosas distintas estoy dando mis primeros pasitos en la escultura, y también he comenzado a explorar el mundo de la fotografía y el de la composición digital. Los tres son caminos que quiero seguir estudiando. En realidad estoy abierto a cualquier nueva propuesta que me ayude a seguir siendo diferente. Ese es mi reto cultivar mi creatividad y también seguir mejorando las técnicas, seguir aprendiendo cosas nuevas.
Quiero finalizar esta presentación agradeciendo a Esther, mi profesora, toda su ayuda y paciencia conmigo. Ha sido un gran apoyo. Estoy muy orgulloso de ella.