Cuando sentí la necesidad de hacer algo más creativo con mi vida empecé a escribir cuentos para niñ@s. “Los niños de hoy crearan la sociedad del mañana –me decía yo- y si queremos que algo cambie habrá que comenzar por cambiar su educación”. Mi idea era escribir cuentos que llegaran a sus corazones, y que comenzaran a educarles en solidaridad, en cooperación y en el manejo de las emociones. Y como no recibí respuesta de las editoriales, con la ayuda del ilustrador Oskar Gorroño, creamos nuestra propia editorial: Tierra de Nubes. Era un proyecto muy ambicioso en el que dimos algún paso importante, pero que no supe sacar adelante porque me temo que yo que no sirvo para empresario. Y tampoco encontré a la persona adecuada para moverlo. Eso sí, al menos pude comprobar que los cuentos gustaron mucho a los niños, pero mucho de verdad.
Por último, quiero decir que para mí este proyecto no está muerto, está simplemente dormido esperando que un beso de verdadero amor lo despierte a una nueva vida.